“Todas las guerras son malas, pero la guerra civil es la peor de todas, pues enfrenta al amigo con el amigo, al vecino con el vecino, al hermano contra el hermano”, así comienza el libro que Arturo Pérez-Reverte presentó el invierno pasado en Madrid con el noble propósito de contarle a sus jóvenes compatriotas los...Leer más
Es una pena que Alejandro Camino haya tenido que cerrar el Museo de Plantas Sagradas, Mágicas y Medicinales del Cusco. Cada vez que pasaba por la vieja ciudad tomaba el camino al local de la calle Santa Teresa para recorrer sus salones y llenarme de entusiasmos. El propio Sapo me acaba de referir que se...Leer más
El libro más competo y actualizado sobre Fitzcarrald lo ha escrito Rafael Otero Mutín, escritor nacido en Iquitos y padre de dos amigos míos, Rafael y Claudia. A Rafael le tomó muchos años terminar una obra que empezó a elucubrar de manera fortuita al enterarse que el inmueble de su familia en la otrora ciudad...Leer más
San Bartolo. Hace unos días me ocupé en esta misma esquina del triste destino de Aimee Pillaca, la boxeadora desaparecida en febrero último en La Pampa y el de sus ocasionales acompañantes. Todos testigos, al parecer, de una violación múltiple en contra de una menor de quince años en un prostibar de este infierno en...Leer más
Aimee Pillaca, 21 años, madre de familia de una niña de cuatro y boxeadora de grandes condiciones según sus amigos en la Federación Peruana de Boxeo. Aimee Pillaca Leguía, una víctima más de de las tantas que va cobrando el crimen organizado que reina en La Pampa, el archipiélago de asentamientos humanos que creció alrededor de la carretera Interoceánica...Leer más
Pachacamac, valle del rio Lurín. Acostumbrados como estamos a saborear lo malo, a solazarnos con las postales que grafican nuestra decadencia no hemos festejado como se debe la inauguración en Lima del Museo de Sitio de Pachacamac, una joya cultural, un acertado monumento a la peruanidad a solo treinta kilómetros de esta congestionada villa. Ayer visité...Leer más
Pueblo Viejo, Puerto Maldonado. La transformación de Puerto Maldonado, una capital amazónica que se parece cada vez más a la altiplánica ciudad de Juliaca, y lo digo con el mejor de los ánimos, en un destino turístico, pasa necesariamente por la puesta en valor de sus bordes ribereños. Esa zona que se avienta sobre los...Leer más
Puerto Maldonado. Dediqué toda la tarde a recorrer junto a Pável Cartagena y Walter Silvera Pueblo Viejo y la ribera del Tambopata que rodea la cada vez más extraña ciudad de Puerto Maldonado.El Madre de Dios y el Tambopata están desatados, avanzan broncos, llenos de furia. Tronantes. Es tiempo de lluvias y desbordes, de repente...Leer más
Parece que no hubiéramos aprendido la lección. El derrame petrolero en Chiriaco, provincia de Bagua, departamento de Amazonas y el de la quebrada Cashacaño, provincia del Datem del Marañón, departamento de Loreto, diez días después, no se acercan ni por asomo a la magnitud de lo sucedido en Ucrania; sin embargo, la forma escandalosamente despreocupada...Leer más
San Bartolo. De acuerdo con Carlín en lo sustantivo, la caricatura suya en La República de hoy es elocuente. Lo ocurrido en el Chiriaco es una tragedia mayúscula. Sin embargo debo decir lo siguiente: 1. Los ríos de la Amazonía, los principales, los más importantes, hace tiempo que se han convertido en un desagüe por donde transcurren...Leer más
Lamas, San Martín. Estoy iniciando una investigación periodística sobre la contaminación con mercurio en las poblaciones cercanas al «desarrollo» minero en Madre de Dios, una de ellas la de Puerto Maldonado. Por ahora me estoy apoyando en lo «visto y vivido» en La Pampa, zona de amortiguamiento de la Reserva Nacional Tambopata. También en los relatos...Leer más
Puerto de Santa Rosa, Loreto. Tres de la mañana en Tabatinga, Brasil. Una brisa fría y penetrante ha cubierto la madrugada con un manto de oscuridad mayor a la de cualquier noche. En este trópico del fin del mundo cualquier cosa puede suceder. El chofer que nos ha recogido en Leticia, Colombia, mira repetidas veces...Leer más
Iquitos. Acabo de cerrar para siempre (qué ingenuo) el libro de Svetlana Alexievich sobre el drama de Chernobil, la hecatombre atómica que terminó de tirar por los suelos la inconmovible ilusión de la fortaleza soviética. Que libro, por dios. Si los académicos suecos le dieron el Nobel a la biolorrusa por su extraordinaria capacidad para descibnir...Leer más
San Bartolo. He empezado a leer Voces de Chernóbil, el desgarrador relato de Svetlana Alexievich sobre la estupidez humana. Un libro de obligada lectura en estos tiempos de absurdos miles y miserias por todas partes. La biolorrusa compone en este primer libro suyo traducido al castellano un fresco de verdad polifónico. El estilo Kapuscinski, mejorado, vuelve...Leer más
En París, a pesar de la amenaza que suponen los arrebatos del Estado Islámico (EI), se podría estar jugando, para bien o para mal, el destino de nuestra especie. Y por eso, los ojos de muchos están puestos en la cumbre que se inicia dentro de pocos días.Leer más
Cusco. Andrés Longhi está convencido que el Comandante Marcos es Julio César Mezzich, el número dos de Sendero Luminoso desaparecido misteriosamente en medio de la guerra que su partido le declaró al resto del país. El fotógrafo de la época de oro de la revista Caretas me fue contando sus sospechas mientras apurábamos un plato de chicharrón de cerdo de los buenos...Leer más
Ica. En extensos territorios de la Amazonía peruana, lamentablemente, el achoramiento es la divisa de colonos y pobladores asentados desde siempre, “narcotizados” todos por el extractivismo y sus tantas pandemias. Lo he constatado en La Pampa, Madre de Dios, tierra de mineros informales, y hace poquito en Ucayali, una región saturada de cultivos de palma...Leer más
Mi tesis es simple, casi de Perogrullo. Mientras le sigamos dando la bola que le damos al loco Darwin o al adolescente de Villa El Salvador que se acaba de graduar de sicario, la actitud piraña de nuestros muchachos (iba a decir de nuestra población) seguirá creciendo como la espuma, hasta el infinito. Hay que...Leer más
Villa Rica.La casa era blanca, blanquísima, de techos a dos aguas y tejas rojas. Una verja de madera impedía el ingreso a la terraza a quienes bajaban a toda prisa a la playa, alborotados, por esas escaleras públicas que utilizábamos también nosotros. En ese patio de entrada donde los Schuler habían colocado una poltrona, unas...Leer más
Quito. Son argentinos y hace unos meses decidieron comprar una combi –una VW 1980-, juntar los pocos ahorros familiares, cerrar la casa y lanzarse a los caminos para llegar a tiempo a Filadelfia y festejar la llegada del Papa sudamericano al corazón del imperio. Me estoy refiriendo a los Walker – Zemborain (Noël, Alfredo y...Leer más