Mi opinión
A los seis años, tal vez a los siete, el niño que entonces era Yuri Hooker vio en la tele un documental de Jacques Cousteau, el oceanógrafo que cámara en ristre se sumergía en los mares más profundos e insólitos del planeta para captar la belleza de unos paisajes insólitos y fascinantes en extremo. La vida del niño que gastaba el tiempo buscando crustáceos en Huanchaco cambió de sopetón: el trabajo del submarinista francés podía ser replicado en los mares donde se fraguaban sus fantasías. Desde entonces el biólogo peruano no ha hecho otra cosa que sumergirse una y mil veces en el azul infinito para aprehender en sus profundidades los destellos de la vida en todas sus formas. Fruto de esas pesquisas, de esa interminable devoción por la exploración científica, van 18 especies nuevas para la ciencia en su haber y una relación de más de 80 que quizás también lo sean. Claro y una colección de documentales submarinos que lo llenan de orgullo. A Cousteau se lo debemos, que mataperro el capitán del Calypso.
¿Qué olor te devuelve a la infancia?
Mis primeros recuerdos están vinculados Huanchaco, donde viví hasta los siete años. No hay nada que me conecte más con esa etapa de mi vida que el peculiar olor del mar de Huanchaco, una mezcla de sal, brisa y mococho.
¿Cuál fue tu primer viaje?
El primer viaje que recuerdo fue de muy pequeño, 3 o 4 años, con mis padres, a Huamachuco. Supongo que nos quedamos algún tiempo pues mi madre me “prestaba” a la señora que repartía leche en su burro, la que me llevaba por todo el pueblo y me devolvía al terminar su circuito. Tengo fracciones de esos recuerdos, cargado a la espalda de la señora viendo las orejas del burro. Extraña historia algo más larga que contar.
¿Costa, sierra o selva?
Digamos mejor el mar, de la orilla para adentro, debajo del mar.
¿Cuál es tu comida favorita?
¡La pregunta más difícil en el país de los mil platos! Tal vez las muchas versiones de la parihuela.
¿Un peruano que te llene de orgullo?
No existe uno en particular, pero mi mayor admiración está en los defensores ambientales, especialmente los defensores indígenas que ponen el pecho y su vida por proteger los bosques, los ríos, sus lagunas y sus tierras tan vulneradas en un Perú ciego e indiferente. También mi enorme admiración y respeto por los guardaparques del Sernanp que protegen nuestra áreas naturales, el bien común.
¿Qué ave propondrías como ave símbolo del Perú?
Por alguna razón, siendo biólogo y apasionado por todo tipo de ser vivo, las aves son tal vez las que menos me han llamado la atención y de las que menos sé… dejaría al gallito de las rocas en ese pedestal.
¿Y qué flor?
Las orquídeas silvestres, especialmente las del bosque montano, esas especies raras que uno se encuentra en algún lugar remoto y sabes que nunca la has visto.
¿Un libro de viajes o aventura?
De adolescente leí varios libros de Jack London y de Julio Verne, como el viaje épico a través de la Siberia de Miguel Strogoff. Creo que un viaje atroz es el que hace Roger Casement a los bosques de Perú, novelado en “El Sueño del celta”, una historia de horror que de alguna manera se replica en la actualidad sobre las etnias de nuestra Amazonía a manos del narcotráfico y los madereros.
¿Tu escritor favorito?
Mario Vargas Llosa podría serlo.
¿Qué te hace sentir orgulloso de nuestro país?
La resiliencia de nuestros compatriotas, cómo el peruano ha sabido forjar un país a pesar de tantos gobiernos profundamente corruptos o indiferentes con el Perú rural y, aun así, ser un pueblo exitoso y amable que resiste a pesar de sus gobernantes. Otro motivo de orgullo claro está, es nuestra enorme biodiversidad y extraordinarios paisajes naturales.
¿Qué personaje te haría cambiar de acera?
Los corruptos, especialmente los mafiosos que hace años tienen raptadas a las instituciones y manejan los gobiernos gane quien gane.
¿Un lugar del Perú o del mundo para vivir el resto de tu vida?
Ya estoy llegando a un momento en la vida en que toca dejar la posta a los chibolos. Espero pronto empezar a construir ese pequeño refugio frente al mar norteño donde dedicarle el tiempo que merecen mis bichitos raros que no he tenido tiempo de estudiar y describir, un lugar a donde mis hijas puedan ir cuando se aburran de estar donde no quieren estar.
¿Una canción?
Imposible, creo nunca tuve una canción o un género favoritos. Tampoco las tomo muy en cuenta, usualmente no tengo idea que dicen. Tengo algún tipo de disociación, tal vez sea la dislexia, pues nunca en mi vida, desde niño, he podido aprender ni una sola canción.
¿Qué es lo que nunca falta en tu equipaje?
Una cuchilla, una linterna, una cámara fotográfica, una máscara de buceo, agua.
¿Un viaje soñado?
De niño vi una revista NatGeo con un artículo con fotos de la gran barrera de coral de Australia. Ese viaje me falta. Ya varios otros viajes imposibles se han cumplido, aunque de hecho quedan muchos en un planeta tan maravilloso.
¿Cuál es el objeto que más valoras?
Mi colección de invertebrados marinos donde tengo muchas especies nuevas para la ciencia aún sin describir. También mi archivo fotográfico donde he registrado los cambios en el mundo que me rodea, las maravillas naturales del Perú, las aventuras vividas y las dulces historias con mis hijas.
¿Una ruta o destino que recomiendas?
El mundo subacuático del Perú que tan poco conocemos, el biodiverso norte tropical, las transparentes y frías aguas de la costa de Arequipa y Moquegua, recorrer todo el litoral del lago Titicaca, bucear en este lago, explorar los bosques montanos de tantos lugares increíbles de los andes orientales, la Amazonía… imposible recomendar una ruta en un país interminable. Un lugar fuera de Perú: bucear en los grandes cenotes de México.
¿En dónde queda el paraíso?
Donde menos humanos hay.
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Yuri Hooker Mantilla se graduó de biólogo pesquero -por ausencia de la especialidad de biología marina- en la Universidad Nacional de Trujillo, su tierra natal. Desde entonces ha desarrollado una fructífera carrera profesional que lo ha convertido en la voz más autorizada para hablar de la diversidad acuática de nuestro país y la riqueza de los recursos hidrobiológicos que tenemos. Es también productor y director de documentales de televisión, fotógrafo y camarógrafo en ambientes terrestres y submarinos y por sobre todas las cosas, un apasionado explorador del planeta. En la actualidad es el coordinador del laboratorio de biología marina de la Universidad Privada Cayetano Heredia. |


