Mi opinión
Mágico, vuelvo al tema de los árboles gigantes y la necesidad de cuidarlos, de abrazarlos con fuerza para salvarnos –y salvarlos- de la destrucción planetaria que nos aflige tal como lo relata el mito harakbut que da cuenta de la creación de bosques de Madre de Dios que vuelvo a recorrer en estos días.
Beth Moon es una fotógrafa estadounidense que desde hace veinte años recorre el mundo para retratar a estos milenarios hijos de la Madre Tierra.
Su primer trabajo, “Ancient Trees. Portraits of Time”, se ocupó de registrar a estos colosos alrededor del planeta. Este último vuelve a recorrer los mismos caminos con el objetivo de capturarlos de noche.
Eso es “Diamond Nights”, la muestra de su trabajo itinerante y muy respetuosa del futuro que nos merecemos. Linda semana para todos…
Beth Moon ha pasado años recorriendo el mundo, visitando los lugares en los que se encuentran los ejemplares de árboles más espectaculares que aún resisten el avance de la civilización.
Su obra es notable por varios motivos: la estudiada selección de ejemplares, la indudable calidad de cada una de sus tomas, la utilización de la platinotipia, un proceso que ofrece unos resultados fantásticos en cuanto a gamas tonales y durabilidad de las copias, y por supuesto el componente emocional que busca transmitir con cada imagen.
Dice Beth: «Yo no quiero simplemente documentar, sino registrar la belleza y el entusiasmo que siento hacia el sujeto al que estoy fotografiando.»
Se calcula que hay tres billones de árboles en el planeta. Cada año el hombre destruye 15 millones de ejemplares. A este ritmo, los árboles desaparecerán en 300 años.
“Es más importante tener más árboles que tener más personas”, escribe Clark Strand en Ancient Skies, Ancient Trees (cielos antiguos, árboles antiguos), un libro publicado por Abbeville Press que recoge las fotografías de Beth Moon.
“Se yerguen como los monumentos vivientes más grandes y antiguos del mundo, y creo que estos árboles tan simbólicos tendrán mayor importancia, sobre todo cuando nos concentremos en encontrar mejores maneras de convivir con el medio ambiente” declara la fotógrafa.
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