Mi opinión
Luis Cisneros ascendió a las sierras más recónditas de Lima para aplaudir la llegada de Felipe Varela, el Chasqui, a la ciudad de Cajatambo. El caminante más famoso del Perú unió los 360 kilómetros que separan Huancaya, en el Alto Cañete y Cajatambo para demostrar la viabilidad de un camino ancestral que puede seguir uniendo y sirviendo a los pueblos. Nelson Chui, gobernador de la Región Lima no podía estar más feliz, gracias a la caminata del Chasqui el Gran Camino Andino de Lima empieza a convocar creyentes de todo el orbe, como en los viejos tiempo. Les dejo la crónica de nuestro enviado especial a tan trascendental acto.
Rumbo a Cajatambo hay muchísimos lugares para desconectarse del tiempo y contemplar la belleza de los paisajes que ofrece este viaje, la pureza de sus lagunas, los vientos estentóreos de las alturas y la aparición de gigantescos nevados desde los más altos parajes del camino. Aunque la carretera sea un fastidio, por las innumerables curvas, el terreno pedregoso y las mejoras pendientes, con una camioneta 4×4 y un buen estado de ánimo es posible disfrutar de la aventura.
Viajábamos de madrugada, una buena alternativa para soñar despiertos con la provincia de Cajatambo, esa tierra profunda enclavada en la sierra limeña a la que llegamos vía Oyón, punto ideal para un desayuno con jugos frescos, palta de chacra, panes calientitos recién salidos del horno pueblerino y un café natural recién pasado para seguir atentos a la llegada de Felipe Varela, más conocido como El Chasqui, un comandante de aventuras que viaja tocando el pututo en cada nueva caminata, saludando a los Apus y a los guardianes invisibles de cada lugar, revalorando los caminos incas del Perú desde hace varios años e invitándonos a sentir la conexión con la Pachamama y el respeto por la naturaleza.
Esta vez llegaba de trazar junto a su equipo de caminantes la ruta a pie de antiguos senderos incas, tramos del Qhapaq Ñan que se hayan en perfecto estado de conservación y que forman parte del Gran Camino Andino de Lima, un gran Corredor Ecoturístico que viene promoviendo el Gobierno Regional de Lima para fortalecer el turismo de esta zona y apoyar el crecimiento de los pueblos que lo componen. Son siete provincias alto andinas y más de 22 distritos de la sierra de Lima que buscan todo lo mejor para sus comunidades, negocios y familias. Fue una caminata intensa de 360 kms la que iniciaron en Huancaya, evidenciando la unión de los caminos desde la provincia de Yauyos hasta Cajatambo, una travesía arriesgada que recorre gran parte de la sierra limeña en la que realizaron algunas muestras para la puesta en valor del camino andino, de su riqueza natural y el potencial turístico de estas rutas ancestrales. Además hicieron un trabajo de reconocimiento de geo-referenciación con apoyo de equipos para verificar recorridos y latitudes.
La Cordillera de Huayhuash
Ubicado a 343 kilómetros de la ciudad de Lima, a una altura de 3, 375 msnm, en las nacientes de la Cordillera de Huayhuash, Cajatambo nos conecta con un mundo de posibilidades viajeras y rutas naturales. Se puede visitar por ejemplo la Catarata Escalaría, Puaj Pajsa, Cuartel Pampa, la Comunidad Campesina de Huayapa o seguir las rutas secretas que conducen a las aguas termales Macanacota, Shucsha y Guñog. Un punto referencial sin duda es el mirador natural Cruz Punta, cerca al cerro San Cristóbal, desde el cual aparecen las siluetas de nevados imponente y sagrados. Y entre las múltiples lagunas que rodean este valle montañoso, alcanzamos a contemplar la belleza de la laguna Tucto que encontramos en el camino a 4,560 msnm, y la laguna turquesa de Viconga, a 4,400 msnm. Realmente maravillosas.
Los caminos que ofrece Huayhuash son impresionantes. Su cordillera une las regiones de Ancash, Lima y Huánuco, y sus trekkings exigen una previa aclimatación para estar a la altura de su naturaleza, a más de 4,700 msnm, sin duda uno de los mejores circuitos de caminata que podemos encontrar.
Al día siguiente visitamos la Comunidad de Huayllapa, a 20 kilómetros de Cajatambo, un pueblo chiquito con gente muy simple y cientos de caminos a la redonda. Todavía conserva la arquitectura rural de sus casas y techos, aunque las maquinarias y el cemento también han hecho de las suyas. Es un pueblo de transiciones que enlaza a los viajeros con el siguiente destino de sus mapas. Desde aquí por ejemplo se puede enrumbar en caballo o a pie y conocer preciosos lugares a sólo 2 horas de distancia.
Guiados por Leonardo Olave, experto viajero de estas tierras, cabalgamos por casi tres horas hacia lo más cerca que podamos estar del Yerupajá, la segunda montaña más alta del Perú (6634m.s.n.m.). Tras mucha adrenalina logramos llegar a una estancia de la comunidad desde la cual pudimos descansar y quedar enganchados con toda esa flora silvestre llena de vida, con el sonido del agua pura que fluía directamente desde los nevados y un grupo sorprendido de animales que nos vigilaba extrañado. Una familia muy simpática estaba a cargo de cuidar el ganado de esas alturas durante todo el año. Luego le tocaría subir a otra familia. Así es la vida en comunidad. Y ahí estábamos ante el gran nevado Yerupajá, iluminando la Cordillera de Huayhuash y todo a su alrededor, haciéndole honor a su nombre que en quechua significa “blanco amanecer”.
Alejada del mundo ordinario esta Cordillera nos asegura un reencuentro memorable con la vida. La fauna silvestre y la paz que emiten sus cumbres hacen de este un gran paraje natural.
La Fiesta del Pueblo
Al llegar a Cajatambo un bailarín de colores nos recibió sonriendo. Señal auspiciosa con sabor a fiesta en la víspera del Corpus Christi. Además coincidió con la llegada de Felipe Varela y su equipo de chasquis, así como de reconocidas autoridades de la región. Para llamar su atención varios grupos de escolares marcharon junto a sus maestros y padres elevando sus voces por una nueva escuela para su pueblo. Diversas comunidades se unieron pidiendo apoyo para el desarrollo de su localidad, frente a todo el equipo que conforma el Consejo Regional de Lima y que esa tarde lograrían importantes acuerdos para el avance de todos.
En cuanto a proyectos de conservación, por ejemplo, se tiene planeado implementar el Parque Temático y el Centro de Monitoreo e Interpretación sobre el Cambio Climático. Otra de las propuestas más innovadoras que se está evaluando actualmente es la instalación de tres centros de investigación científica glaciar en pueblos adyacentes a tres nevados de la región Lima y que serían los primeros centros de investigación glaciar en el Perú.
Se reconoció por ejemplo a la Danza de los Huancos como Patrimonio Inmaterial de la Provincia de Cajatambo. También se declaró como Corredor Eco Turístico al Gran Camino Andino de 360 Kilómetros que inicia en el distrito de Copa, Cajatambo, continua por Oyón, Huaura, Huaral, Canta, Huarochirí y concluye en el distrito de Huancaya, región Yauyos. Actualmente la Dirección Regional de Comercio Exterior y Turismo viene desarrollando reuniones de coordinación con los agentes involucrados del proyecto, municipalidades provinciales, distritales, comunidades campesinas, entre otros, para elaborar el perfil del proyecto y gestionar el presupuesto para la ejecución ante el Plan COPESCO, del Mincetur.
Asimismo se aprobaron otras ordenanzas referidas al manejo y conservación de los camélidos sudamericanos alpaca y vicuña por las Comunidades Campesinas aledañas, importante paso para el desarrollo económico, social y ambiental de la Región Lima y para la protección de estos animales sagrados.
En cuanto a la gastronomía local se declaró como plato de bandera de este pueblo y de la Región Lima al Pari, la famosa Sopa de piedra. De lejos el plato típico que mejor representa la opulencia y las costumbres de Cajatambo. Este potaje no es cualquier cosa, reúne carne de res, carnero, pollo o gallina y cuy, por eso se cocina durante varias horas, para lo cual se prepara un aderezo especial y se deshilachan las carnes una por una. Todo ese trabajo lo realizaron varias mujeres campesinas, que desde la madrugada estuvieron encendiendo los troncos de eucalipto, alistando las brasas para cocinar los cuyes y calentando las piedras que luego harán este plato una sopa burbujeante difícil de acabar. Según la tradición el Pari se ofrecía a los antiguos chasquis para recuperar su energía, para que les de fuerza y calor durante sus viajes. Hoy sólo se sirve en días de fiesta.
Más tarde, la música de fondo y el tronar de los latigazos acompañaban la danza de los negritos que inspiraba la admiración y el baile de sus paisanos. Muchos colores en cada vestimenta, en las flores y fuegos artificiales que acompañaron a la Virgen Santa María Magdalena en su procesión por el pueblo, iluminada por la luna llena y de retorno a la Iglesia que honra su nombre. Todos comulgaban con respeto y amor a su patrona. Los cajeros con sus quenas y tambores, los Retaguardia con los sonidos de sus látigos, los Huancos con el amarillo de sus trajes y la elegancia de sus danzas, los negritos con sus ponchos, sombreros y las campanas que vibran en sus manos. Los mensajeros de Pachangará con su música orquestada reunían arpas, violines, saxofón y trompetas. Todos juntos siguieron musicalizando el resto de las noches y no pararon hasta la salida del sol.
Cómo llegar:
Buses Lima – Cajatambo: 45 soles Empresa Turismo Cajatambo
Cajatambo – Huayllapa: 15 soles y salen aproximadamente a las 5pm.
En Huayllapa se pueden alquilar burros, caballos y contratar arrieros para hacer rutas de tres días.
Alquiler de burro: 15 soles por día, caballos: 25 a 30 soles por día.
Contratar un arriero: 30 a 35 soles por día y cocinero 40 soles por día.
Teléfono de la comunidad: 8106342
24/07/2014