Mi opinión
Chema Formentí continúa su magisterio americanista en España, ahora desde el maravilloso Museo del Jurásico de Asturias (MUJA), en el municipio de Llastres (Colunga), sobre el Cantábrico; sin duda, una de las postales más hermosas que conozco del principado de Asturias. El título de la charla: “Montañas de colores, apus, desiertos y volcanes del Altiplano andino”; un recuento de sus viajes, en diapositivas y exquisita narración, por los apus Salcantay y Ausangate, en el Cusco-Perú; las tierras de Sajama, Uyuni y Sud Lípez, en Bolivia; el desierto de Atacama y el Parque Nacional de Lauca, en Chile y la quebrada de Humahuaca, en Argentina.
Una navegación fascinante por unas tierras de colores en un fin del mundo salvaje y extremadamente hermoso.
Tuve la suerte de acompañar a Chema en su primera vuelta al Ausangate, en esa oportunidad gozamos como chavales viendo los trajes con que se atavían las montañas Yauricunca, sobre los cuatro mil metros de altura, allí donde se ahogan las plantas y fructifican la desolación y los vientos fríos.
Estoy seguro que la conferencia de José María Díaz-Formentí, Chema, en la Semana de la Ciencia del Muja será un éxito. Qué pena no estar allí, que lástima no acompañarlo al lado de José María García Ramos y Laura Piñuela, los impulsores del gabinete científico que atesora la tercera colección más notable de icnitas o huellas de dinosaurios fosilizadas del planeta.
Suerte, compañero, que los apus te sean propicios.
Conferencia con diapositivas que impartiré el próximo sábado 14 de noviembre a las 19:00 en el salón de actos del Museo del Jurásico de Asturias (MUJA), en Colunga, dentro de los actos programados en la Semana de la Ciencia. La entrada es gratuita. En ella mostraré un recorrido por los paisajes que más me han impresionado del mundo que he conocido: Salkantay y Ausangate (Perú), Sajama, Uyuni y Sud Lípez (Bolivia), Atacama y Lauca (Chile) y la Quebrada de Humahuaca (Argentina). Os copio la nota de prensa que he preparado por si queréis más información
MONTAÑAS DE COLORES: Apus, desiertos y volcanes del Altiplano
El Altiplano andino es una extensa meseta situada a gran altitud media (3800 metros sobre el nivel del mar) en el corazón de la cordillera de los Andes, interpuesto entre sus cadenas montañosas orientales (que caen hacia la selva amazónica y otros bosques y llanuras subtropicales) y las occidentales (frente al océano Pacífico). Se extiende desde el sur del Perú hasta el noroeste de Argentina, cruzando Bolivia de norte a sur en la zona en la que la cordillera de los Andes alcanza su mayor anchura.
Es esta una región de gran interés cultural, cuna de notables civilizaciones como la Tiahuanaco, y que formó parte del imperio de los Incas. Su herencia cultural, con fuerte componente indígena mestizado con el español, se manifiesta por doquier (festividades, costumbres, atuendos, etc), y ha dejado al mundo herencias tan notables como la domesticación de la patata y de otras plantas extraordinarias aunque menos conocidas.
Además de sus valores culturales, el Altiplano se rodea de impresionantes paisajes, que son el tema central de esta conferencia. Legado del enorme lago interior que fue hace miles de años, queda hoy el extenso lago Titicaca y el inmenso salar de Uyuni. Grandes montañas nevadas se divisan en el horizonte, muchas de las cuales tuvieron un carácter sagrado (“Apus”) para las culturas indígenas, que siguen hoy venerándolas.
Es una zona además de intensa actividad sísmica y volcánica, que se traduce en la existencia de numerosos volcanes y paisajes de ese origen, con rocas y laderas de sorprendentes estratos de color, lagunas cuyas aguas varían de color, que a veces dan alimento a miles de flamencos de tres especies y otras contienen sales tan tóxicas que prácticamente imposibilitan la vida. Paisajes infinitos de salinas cristalizadas, rocas solitarias esculpidas por el viento, en un ambiente casi carente de vegetación por la dureza de su clima y altitud. El resultado son paisajes surrealistas, casi irreales, evocadores de otro planeta o de un estado primigenio del nuestro.
En la proyección comenzaremos mostrando los nevados Salkantay y Ausangate, cercanos a Cuzco (Perú), que fueron dos montañas sagradas muy importantes para los Incas. Del multicolor entorno del Ausangate nos adentramos en Bolivia, viajando al parque nacional Sajama, dominado por su impresionante volcán homónimo. Haciendo frontera con este parque existe otro muy similar, esta vez en Chile: se trata del parque nacional Lauca, con hermosos estratovolcanes nevados, lagunas y pantanos (bofedales) frecuentados por alpacas y vicuñas. El valle del Lluta desciende desde estas alturas a más de 4000 m hasta el océano Pacífico cruzando el desierto de Atacama. Se trata del desierto más árido del mundo, con zonas en las que jamás se registró precipitación alguna. Desde Arica nos dirigimos a san Pedro de Atacama, donde mostraremos los paisajes del valle de la Muerte y el campo de géiseres del Tatio.
Volcanes en el horizonte como el imponente Licancabur o el activo Ollagüe hacen frontera entre estas tierras atacameñas y las de la impresionante puna boliviana al sur del Salar de Uyuni. Este último es el más grande del mundo (como la provincia de Salamanca), fuente de litio para el mundo y referencia de calibración de satélites. Desde el mismo nos adentramos en los surrealistas paisajes de la provincia potosina de Sud Lípez: son desiertos volcánicos multicolores, con campos geotermales y lagunas de sorprendentes colores.
Desde su extremo sur volvemos a entrar en Chile, tomando la carretera que desde san Pedro de Atacama cruza el paso de Jama y entra en Argentina, cruzando la puna jujeña para llegar a Purmamarca. Estamos en la Quebrada de Humahuaca, último destino de nuestro viaje. Se trata de un gran valle subdesértico que desde hace 10000 años actuó de autopista de comunicación entre las punas y altiplanos de Bolivia, los boscosos valles subtropicales argentinos y el desierto de Atacama y litoral chileno. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, mostraremos su asombrosa geología y sus “cerros pintarrajeados”, como describe una canción local.
5/11/2015