Mi opinión
Las Hijas de la Montaña, el colectivo de mujeres-coraje que lideran Flor Cuenca y Lichi Vásquez, del centro poblado Cusquín, en las alturas de Ancash, la primera y cusqueña la segunda, van a iniciar en los próximos días el esperado ascenso a la cima del Manaslu, el Kutang, “la montaña de los espíritus” de la cordillera de los Himalayas. Con ellas, en la misma y peruanísima cordada, van a estar Malú Espinoza, huaracina, Yudi Mamani, puñena y Beta Guzmán, cusqueña, las cinco atletas, deportistas de altura nacidas y forjadas en los Andes de nuestro país. Lo he dicho miles de veces: en las cordilleras peruanas, en sus ríos vigorosos, en los desiertos de la costa, en nuestro mar infinito y en la exultante Amazonía se encuentran los campos, los estadios naturales, podría decir, donde empiezan a brillar con luz propia los hijos e hijas de las montañas que nos abrigan. Las cinco mujeres montaña que atacarán cumbre en los Himalayas son un ejemplo de lo que digo. También los atletas de larga distancia, maratonistas y marchistas, que acaban de volver de Paris y por supuesto Stefano Peschiera, el medallista olímpico que se mueve como un pez -o un ave fragata, podría decir- en los océanos del mundo. Menciono algo más sobre el proyecto Hijas de la Montaña, tal vez lo más importante de su propuesta: las muchachas detrás del reto se han unido para inspirar y demostrar el poder ilimitado que tienen las mujeres peruanas para la práctica de los deportes de alta montaña, un espacio de la vida social dedicado casi en exclusiva a los hombres. Magnífico, de este asunto de tanta trascendencia había hablado hace mucho con Lixayda Vásquez, Lichi, durante una entrevista que publicamos en esta plataforma. Para ella, mujer montaña de las bravas, mientras los hombres competimos por ser los primeros, por demostrar, así no lo queramos admitir, nuestra superioridad sobre los elementos, las féminas encuentran en la montaña la esencia de su linaje (de su género) y ascienden a las alturas con harto respeto, regocijo y espíritu de comunidad. Elementos tan importantes para vivir en armonía con la Pachamama. Les dejo la nota que acabo de leer en Cumbres Nevadas, la muy prolija y amena revista que dirige desde la Cordillera Blanca Ricardo Espinosa, el Caminante, sobre el ascenso al Manaslu de estas peruanas de acero.
Por Cámara de Comercio, Industria y Turismo de Áncash, tomado de Cumbres Nevadas, revista de arte, cultura, actualidad, turismo y más…
Cinco mujeres montañistas, originarias de los Andes peruanos, tienen como objetivo alcanzar en los Himalayas, la cima del Manaslu («Montaña de los Espíritus»), de 8163 metros, y la octava más alta del mundo. Lo harán autónomamente, sin oxígeno suplementario ni porteadores de altura. Por si fuera poco, juntas planean bajar 100 kg de basura de los campos bases del Manaslu (todos encima de los 5000 metros de altitud), en un llamado por el cuidado ambiental y un desafío a las normas de género del montañismo a escala mundial.
Más información en Hijas de la Montaña: el desafío de la primera expedición de peruanas en los Himalayas
Marcando un hito en la historia del montañismo peruano y latinoamericano, estas valientes y decididas peruanas de altura pretenden ascender a la cumbre del Manaslu, y así motivar la participación femenina en actividades de montalismo en el Perú y en el mundo. No menos importante, lograrán posicionar el nombre del Perú como país de grandes montañas y montañistas profesionales, capaces de demostrar sus aptitudes deportivas en otras cordilleras del mundo.
La hazaña la realizaran del 1 de setiembre al 15 de octubre, en aproximadamente 45 días de expedición (toma entre 25 y 35 días hacer cumbre desde el campo base, con temperaturas que pueden llegar a los -40 ° grados).
Sobre las montañas de todo el mundo las féminas no se caracterizan por su numerosa presencia. Pero en Perú esto es dramático: solo cuatro mujeres peruanas han escalado alguna de las montañas de más de 8000 m. En la Escuela de Guías de Montaña del Perú se han graduado 150 personas durante sus 55 años de historia: ninguna es mujer. Los obstáculos para la participación en deportes de montaña incluyen la falta de acceso a instalaciones o clubes, la ausencia de modelos femeninos y la situación del país en torno a la cultura general del sexismo y del machismo.
La participación en deportes mejora la salud física y mental, pero muchos estudios han demostrado también que los deportes son fundamentales para promover la igualdad de género. Ayudan a las mujeres jóvenes y a las niñas a desarrollar habilidades que son transferibles a la vida cotidiana, tales como liderazgo, trabajo en equipo y confianza en uno mismo. Hijas de la Montaña pretende fomentar la participación femenina en los deportes de montaña del Perú, convirtiéndose en modelos tangibles para otras mujeres y niñas peruanas.
Según la ONU Mujeres: «Las mujeres en el deporte desafían estereotipos de género y normas sociales, constituyen modelos inspiradores y muestran a hombres y mujeres como iguales»
Flor Cuenca ha ascendido con éxito a nueve de las cumbres de más de 8000 m del mundo, y siempre se ha sorprendido de la cantidad de basura que hay en las montañas, especialmente en los campamentos más altos. Aunque los servicios de Parques Nacionales están enacragados de mantener limpias las montañas y se paga obligatoriamente un impuesto destinado a ese fin, no se cumple de manera efectiva y hay mucho que se puede y debe hacer. Como las expediciones comerciales abandonan constantemente basura y equipo usado en los campamentos altos, este grupo de mujeres tiene como plan llegar a la cumbre de forma ambientalmente responsable y concientizar a los montañistas y trabajadores sobre los problemas que provoca el turismo de alta montaña en el entorno. Lo harán de tres maneras:
- El equipo llevará solo lo necesario para la expedición, sin embalaje innecesario, y empacará todo lo que llevó, incluida la basura que genere.
- Durante los viajes de aclimatación a los campamentos altos. recogerán basura y equipo desechado por otros y lo descenderá al campamento base. Al dejar la montaña -se han propuesto bajar 100 kilos de basura- esta será transportada a Samagon.
- Durante los días de descanso en el Campamento Base, el equipo discutirá cuestiones medioambientales con otros montañistas y los animará a que se lleven no solo su propia basura, sino tambipen la que dejaron otros.
Leer más en Cadáveres y basura salen a la luz por el deshielo del Everest en los maravillosos Himalayas
El 27 de mayo pasado la Cámara de Comercio, Industria y Turismo de Áncash lanzó oficialmente el proyecto Hijas de las Montañas, más que simplemente alcanzar la cumbre de un pico del Himalaya, una demostración de voluntad y perseverancia para seguir un sueño, por más difícil que éste sea. Al respaldar está expedición la Cámara también promueve la igualdad de género y el empoderamiento femenino en todos los ámbitos de la sociedad, pues este gran reto encarna la búsqueda de un mundo donde las mujeres sean vistas como personas con poder y determinación, y donde se les brinde las mismas oportunidades de alcanzar su máximo potrencial.
La Cámara de Comercio, Industria y Turismo de Áncash está dedicada -de manera especial- a resaltar y fomentar el turismo en la región. En 2023 Áncash recibió más de 332,000 turistas, quienes generaron in gresos significativos en diversos sectores. Este flujo turístico impulsa toda la economía local a través de la ocupación hotelera, el gasto en restaurantes, el uso de transporte y la compra de productos locales. Además, crea empleos directos e indirectos y motiva mejoras en infraestructuras como carreteras y servicios públicos. Sus ungresos apoyan también a proyectos comunitarios y a la preservacioin del patrimonio cultural.
Las hijas de la montaña
Flor Cuenca Blas (Huaraz): Líder de la expedición. Experimentada deportista de montaña con varios ochomiles en su haber. Vive (su deporte) en Alemania y es el corazón y motor del proyecto.
Leer más en La lucha de Flor Cuenca, la ancashina que conquista las cimas del Perú y el mundo
Más info en ¡Lo volvió a lograr! Montañista peruana conquista su sétima cumbre en los Himalayas
Lixayda «Lichi» Váquez (Cusco): Co-líder de la expedición. Más de cien montañas bajo sus botas en Latinoamérica. Dirige el proyecto Mujer Montaña en Perú, atrayendo a más mujeres al deporte de las alturas. Mamá de un pequeñín.
Más info en Lichi Vásquez, mujer montaña, mujer coraje…
Margarita «Malu» Espinoza Silvestre (Huaraz): Expedicionaria profesional. Amante de los desafíos técnicos, ha abierto nuevas rutas en nevados peruanos y escalado una montaña virgen en una expedición femenina en los Himalayas. Mamá de un pequeñín.
Yudith «Yudi» Mamani Mamani (Puno): Expedicionaria. De las orillas del lago Titicaca, que la vieron nacer, hasta el nevado más alto del Perú, su pasión por las alturas solo ha crecido con el tiempo; y su mayor anhelo es llevar consigo a cuanta mujer lo desee.
Roberta «Beta» Guzmán Coronado (Cusco): Expedicionaria. Ya era una abogada exitosa cuando enfrentó su primera montaña: el Misti. Y el volcán le otorgó aún mayor ímpetu a su espíritu guerrero y decidido, pues no paró de escalar cumbres en donde las hubiera. Este será su primer ochomil.
