Mi opinión
Qué bueno, en medio de tantas noticias trágicas, ésta que les dejo es esperanzadora. Ayer no pude conciliar el sueño luego de ver las imágenes de decenas de ronsocos (o capibaras) huyendo del fuego en una localidad de San Martín ante el asombro de una población que no sabía realmente qué hacer. Verlos tab desamparados me rompió el corazón, la situación en la vertiente oriental delos Andes de nuestro país (y en toda la cuenca amazónica) es grave, gravísima, los incendios forestales que se vienen presentando con inusitada ferocidad en medio de una sequía atroz están poniendo en riesgo a los habitantes, humanos y no humanos, de casi todo el subcontinente sudamericano. Los incendios que podríamos empezar a denominar ambientales est+an haciendo estragos calamitosos en Ecuador, Colombia, Brasil, Bolivia y el Perú, hasta donde sabemos, y si no se hace una intervención de carácter transfronterizo los daños por venir van a ser colosales.
Estemos atentos, como lo han estado los compañeros de la cuenca del Apayacu, en Loreto, a la vida en nuestros bosques y ríos. Los manatíes, esos simpáticos y elusivos mamíferos, hace buen tiempo que están amenazados en nuestro país, así lo atestigua su inclusión en las listas CITES y el Libro Rojo de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Si les da tiempo pinchen en la notita al interior del artículo que les dejo, en Colombia, hace unos años, el salvataje colectivo de un manatí en Puerto Nariño se convirtió en el detonante de una campaña de conservación de la naturaleza espectacular. Ojalá que en nuestro país sucesos como ese se repitan y se multipliquen, ya lo saben #OtroMundoesPosible, hay que seguir construyéndolo.
Tomado de las redes de Instututo del Bien Común
Durante una pesca autorizada de paiche, miembros de la Asociación de Pescadores y Procesadores Artesanales El Manatí de Apayacu actuaron rápidamente y liberaron a un manatí amazónico, especie en peligro de extinción, que quedó atrapado en las redes. Gracias a esta intervención de los pescadores, el manatí volvió ileso al agua. 
Desde el 2011 los pescadores y procesadores artesanales de la cuenca del Apayacu, organizados en asociaciones conocidas localmente como APPAs, vienen fortaleciendo sus capacidades gracias al Instituto del Bien Común (IBC) y la Dirección Regional de la Producción (DIREPRO). Estas asociaciones operan conforme a un programa de manejo pesquero que promueve el uso sostenible de los recursos naturales y contribuye a la protección de especies en peligro, como el manatí (Trichechus inunguis). 
Leer más en La bella historia de un manatí que cambió la vida de una población colombiana
¡Un gran ejemplo de compromiso con la conservación y la biodiversidad en el Perú! 
Actualmente la iniciativa recibe asesoramiento técnico del IBC con apoyo de Conservación Internacional (CI), Derecho Ambiente y Recursos (DAR) y fondos propios de las asociaciones de pescadores.
#Conservación#Biodiversidad#Sostenibilidad#Loreto#Perú#Manatí#ManatídeApayacu
