Mi opinión
Los barbadenses, preocupados por la crisis del turismo planetario que golpea fuerte, más fuerte, a los países del Caribe, acaban de lanzar una ingeniosa campaña de promoción que intenta capturar visitantes inusuales, esos que no quieren quedarse confinados en casa y tienen la posibilidad de laborar en cualquier lugar del mundo. Fantástico: un año como mínimo y sin trámites mayores en una isla que es un encanto. Como para pensarlo y lanzarse a la piscina. Lo estamos pensando, ténganlo por seguro.
La primera ministra de Barbados, Mia Amor Mottley, aseguró, que las personas que “puedan venir y trabajar desde aquí en el extranjero, digitalmente” tienen las puertas de la isla abiertas. Una de las cosas que señaló Amor Mottley en una conferencia de prensa es que la pandemia por el nuevo coronavirus demostró que será difícil viajar a corto plazo, debido a todos los requisitos y pruebas.
Viviendo el aislamiento en Barbados
El gobierno anunció esta medida como parte de la promoción de nuevos conceptos turísticos. Además, cada persona que no puede estar en su país por la pandemia, puede ir a disfrutar de la hospitalidad de la isla.
La única condición es que tendrán que hacerlo durante 12 meses, para evitar el tránsito continuo y la posible propagación del virus. Si nada te ata directamente a tu empleo, familia o cualquier otra situación, Barbados puede ser la isla ideal para pasar la cuarentena.
Este plan será difundido en varias comunidades de Barbados. El fin es mantener la economía de la isla, pero hacerlo de manera objetiva y con la ayuda de la sociedad. La primera ministra aseguró que el buen funcionamiento del plan depende tanto de los habitantes como de los turistas. Todos deben hacer un esfuerzo, y Barbados está dispuesto a adaptarse a esta crisis.