Mi opinión
Me alegra que la iniciativa del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) que le confiere el estatus de árboles patrimonio o patrimoniales a los abuelos más notables de las localidades que lo soliciten venga ganando adhesiones en todas partes. De hecho, las notas sobre esta simpática y muy atinada campaña que subimos en las últimas semanas a esta plataforma han sido las más leídas. Lo he dicho siempre y en todos los tonos: las dependencias estatales cuyo encargo es el de gestionar y salvaguardar nuestro patrimonio natural están en la obligación de generar conciencia ambiental entre los peruanos. Felicito nuevamente a las autoridades del Serfor y a los municipios que se han sumado al esfuerzo: estamos obligados, Estado y sociedad, a poner en valor de una vez y para siempre la herencia natural que recibimos de los que nos precedieron.