Reconstrucción digital de unos murales moche en la costa norte del Perú, ¡qué maravilla!

Entre los años 200 y 800 de nuestra era, al pie del cerro Mocollope (en el valle medio de Chicama, en La Libertad) se levantaron varias estructuras de adobe que parecen haber funcionado como un centro cívico – religioso local. Entre 2013 y 2014 se realizaron excavaciones en uno de los edificios más grandes, la llama Huaca El Castillo, que habría tenido una plaza cercada por muros pintados. De los murales, lamentablemente, queda poco. Pero un fragmento de estas paredes llamó la atención de los arqueólogos. Es este:

Para los que algo saben del arte mochica, se puede adivinar allí los restos de un personaje de perfil, quizá un guerrero, caminando de lado. Pero, ¿cómo es posible llegar a esa conclusión a partir de una tan segmentada? Mediante el análisis comparativo.

Primero habría que tomar en cuenta que este es un dibujo que comparte un estilo muy similar al de la pintura de línea fina que aparece en las vasijas moche. De ese tipo de diseños tomaremos algunos ejemplos. Fíjense en el personaje de la derecha que aparece en estos tres dibujos extraídos de tres vasijas distintas (en el primer ejemplo puede verse cuál es el aspecto original de la vasija, con el dibujo sobre la superficie curva, y al lado, el dibujo «extraído»» de la misma y colocado en un plano). Nótese especialmente el personaje que aparece a la derecha en cada una de las tres escenas.

 

 

La escena es muy común en el arte moche. Se trata de un guerrero llevando a cuestas a un prisionero (desnudo, siempre sin tocado o gorro). El guerrero lleva sobre el hombro su porra y de la porra cuelgan varios objetos. Estos objetos son un gorro (es decir, el gorro del prisionero), una porra (la porra del prisionero) y la ropa (del prisionero). 

 

Un segundo factor a tener en cuenta es que el mural de Mocollope está sobre las paredes de un templo moche. En dos de ellos, probablemente los mejor conocidos y estudiados, hay temas pintados muy similares entre sí. Me refiero, claro, a la Huaca de la Luna (en el complejo Huacas de Moche) y a Huaca Cao Viejo (El Brujo). En ambos casos se han recuperado escenas, razonablemente conservadas, de procesiones de guerreros caminando en una dirección lateral y llevando una porra sobre el hombro con objetos que cuelgan de ella. 

 

 

 

Fragmento de una escena de procesión de guerreros en la Huaca de la Luna (Valle de Moche).

 

Nótese que este lleva en la mano un escudo cuadrado (en vez de una cuerda con un guerrero) y que de su porra también cuelgan otros objetos. Si bien es imposible tener una certeza absoluta sobre el aspecto original del diseño, este es bastante probable. Se cree que el mural forma parte de una escena mucho más amplia (se ha encontrado evidencias de un segundo guerrero, por lo menos), pero eso es algo que sólo nuevas excavaciones podrán demotrar. 

 

Hombres tomados de las manos

 

No es el único mural encontrado en Mocollope. En 1995 las investigaciones arqueológicas en este lugar revelaron restos de otro mural. En la siguiente imagen puede verse parte de este (hemos forzado el contraste de los colores para que se distingan mejor)

 

Nuevamente hay que aclarar que estas reconstrucciones hipotéticas no son un capricho de los arqueólogos, pues sus ubicaciones y disposiciones en diferentes templos moche son similares. Junto con los murales, los arqueólogos encontraron la tumba de hombre joven cuyo cuerpo había sido seccionado en tres partes. Se cree que haya sido un prisionero (acaso similar a los de la figura 2). 

 

 

 

 

 

 

La primera etapa del Proyecto Arqueológico Mocollope ha sido financiada por la Municipalidad Distrital de Chocope (localidad en la que se encuentra la huaca) y por la Fundación Max Díaz. El trabajo realizado, de cuatro meses, ha consistido en la limpieza de pozos de huaquero (realizados anteriormente por saqueadores que han afectado severamente el sitio arqueológico) y excavaciones. Ha contado con la dirección de Jorge Quijano Rojas, la asesoría de Régulo Franco (director del Proyecto Arqueológico El Brujo) y la colaboración del arqueólogo Daniel Castillo (quien gentilmente nos ha brindado parte de la información y algunas de las imágenes de esta nota) de la Fundación Max Diaz, entre otros investigadores. El mural más antiguo fue excavado por Marcus Reindel.

 

 

Nota: Esta es una versión actualizada de un artículo que publiqué, originalmente, en 2014

Más información en:

 

 

Acuña, José y Monzón, Luis: «Museo arqueológico de sitio y centro de investigación para el Complejo arqueológico Mocollope», Tesis. UPAO, 2019

 

Franco, Régulo: «Mocollope. Últimos descubrimientos en un centro cívico ceremonial Moche en la costa norte», Revista Arkinka, 2016

 

Franco, Régulo: Aproximaciones al significado de las representa-ciones murales Mochica de la fachada principal y el patio superior de la huaca Cao Viejo, Complejo El Brujo, costa norte del Perú». En: Quingnam 2: 7-52