Mi opinión
Les dejo los primeros comentarios de Marc Jean Dourojeanni sobre la recientemente aprobada -por insistencia congresal, debo recordarlo- Ley del Cuerpo de Guardaparques del Perú, el marco legal que esperamos les brinde a estos abnegados servidores públicos los derechos que durante tanto tiempo han venido reclamando. Como lo comenta Dourojeanni, fundador del sistema nacional de áreas naturales protegidas y baluarte de la conservación de nuestra herencia natural, la ley que se acaba de dar presenta omisiones y vacíos que deben ser superados pero que debe verse en esencia, como lo hemos venido diciendo, como un paso adelante en el fortalecimiento de la gestión de ese 18 por ciento del territorio patrio bajo protección. En el Grupo Viajeros lo entendemos así, por eso es que vamos a seguir insistiendo en que la ley que comentamos y el reglamento que se debe elaborar próximamente nos sirva de insumo básico para seguir construyendo mejores condiciones laborales y de vida para los guardaparques peruanos. El país necesita guardianes de la naturaleza bien remunerados y tratados, y que el número de ellos, como lo ha señalado últimamente José Carlos Nieto, jefe del SERNANP, se duplique de inmediato para mejorar el cuidado que les hemos encomendado. Y que resulta imprescindible para construir el futuro que nos merecemos.
por Marc Dourojeanni, profesor emérito de la UNALM, para Pronaturaleza. Foto principal Miguel Zamalloa.
Hace 63 años el Congreso aprobó, por insistencia, la Ley N° 13694 que creó el primer parque nacional del Perú, el Parque Nacional Cutervo. Este hecho transcendental, que marcó el comienzo de las tareas efectivas de conservación de muestras de ecosistemas naturales en el Perú fue, en efecto, logrado por medio de un acto de rebeldía contra el Poder Ejecutivo que se oponía firmemente. No importan los motivos que podían ser, o no, justificados. Lo importante es que, otra vez, este año esa situación se repitió con otra medida, igualmente fundamental para el futuro de las áreas naturales protegidas del Perú, la Ley N° 5755, la Ley del Cuerpo de Guardaparques del Perú. El héroe indiscutible y solitario de 1961 fue Salomón Vílchez Murga, un diputado por Cajamarca. Los héroes de este nuevo hecho inédito han sido decenas de guardaparques y algunas personas más, en la academia, en las organizaciones no gubernamentales y, claro, en el mismo Congreso.
Más info en HITO HISTÓRICO: Congreso de la República aprueba por insistencia Ley del Cuerpo de Guardaparques del Perú
Realmente es destacable que estos dos acontecimientos se hicieran en contra de la voluntad del Poder Ejecutivo que, en ambos casos, demostró poca voluntad de cambio, rigidez burocrática y, claro, desconocimiento de la realidad del Perú profundo. Por cierto, no todos… siempre hay excepciones
importantes como, en el caso actual, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (SERNANP) que, debe recordarse, hasta pocos años atrás también se opuso a tan justa como necesaria medida.
Este autor sigue pensando que la nueva ley pudo ser mejor y más completa, por ejemplo, absorbiendo otros cuerpos de trabajadores, que defienden con la vida el patrimonio cultural y natural de la nación y, en especial, definiendo la estructura de formación de los cuadros. Pero este es momento de regocijo. La posibilidad de mejoras está abierta, gracias a este primer paso.
Termino felicitando a los actores de este logro sin precedentes. No puedo citar a tantos, pero les recuerdo a quienes lean esta nota que además de los propios guardaparques, especialmente los que estaban organizados en su propia defensa, este es día de agradecer a Pronaturaleza que desde siempre
brindó apoyo especial a esa iniciativa, al nuevo SERNANP y al Ministerio del Ambiente, a la Pontificia Universidad Católica del Perú y a la Universidad Nacional Agraria que hicieron lo que pudieron para impulsar la ley y, sin duda, por lo menos, a un personaje que fue extraordinariamente proactivo. Me refiero al Dr. Mariano Castro, quien asumió esa lucha como prioridad a lo largo de varios años.
Ojalá que, en el futuro, el Poder Ejecutivo se muestre más flexible y receptivo con las iniciativas que, pese a ser diferentes, son esenciales para el futuro. Sin embargo, a este punto ahora como 63 años antes, el Perú debe agradecer la actitud del Congreso en este asunto.
