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World Monuments Fund y gobierno del Cusco inician restauración del templo de Marcapata en la Ruta del Ausangate

Mi opinión

El templo de San Francisco de Asís en Marcapata, provincia de Quispicanchi, es una de las joyas más brillantes del barroco andino y un punto también de obligado peregrinaje para los fieles y vecinos de uno de los rincones más bellos y de más rica historia del departamento del Cusco. Por ello la iglesia construida en el siglo XVIII fue reconocida como Patrimonio Cultural de la Nación en el año 2015 y poco tiempo después incluida en la lista elaborada por el World Monuments Fund de los sitios en nuestro país que requieren ayuda urgente para asegurar su adecuada conservación.

Saludamos el inicio de las obras que WMF, el Gobierno Regional del Cusco y las organizaciones aliadas en la tarea se han propuesto realizar en Marcapata. No son estos días felices para la nación, la violencia política ha tomado por asalto la agenda pública y las calles; aun así, nos toca seguir bregando por el cuidado de nuestros bienes patrimoniales y la búsqueda de soluciones ingeniosas para retomar el cauce del desarrollo que nos merecemos, #OtroMundoesPosible


La Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco empezó la restauración del Templo de San Francisco de Asís de Marcapata en Cusco a inicios de este mes gracias al apoyo de World Monuments Fund. Como se sabe la organización dedicada a salvaguardar el patrimonio monumental del planeta viene apoyando los esfuerzos de preservación de la iglesia desde el 2010 con su inclusión en el programa Watch y el desembolso posterior de un fondo semilla en el año 2017 entregado a la Parroquia de Andahuaylillas para la elaboración del expediente técnico para la conservación y uso social del templo. Fondo que fue completado con aportes del Arzobispado del Cusco y la Parroquia San Francisco de Asís de Marcapata, así como la participación de la Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco en los reconocimientos arqueológicos preliminares.

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La ejecución de la restauración es ahora una realidad, gracias al trabajo de un equipo interdisciplinario de nueve profesionales con el apoyo de especialistas donde sobresalen nueve restauradores de murales. Solo durante las primeras tres semanas de trabajo, se ha descubierto nuevas pinturas murales, gracias al esfuerzo conjunto de la Dirección Desconcentrada de Cultura – Cusco, Jesuitas del Perú, Parroquia de Marcapata y WMF Perú.

World Monuments Fund (WMF) es la principal organización independiente dedicada a salvaguardar los lugares más preciados del mundo para enriquecer la vida de las personas y fomentar el entendimiento mutuo entre culturas y comunidades.

WMF viene trabajando en Perú desde 1996 y la oficina afiliada se estableció en 2014 como el representante local de WMF para brindar asistencia en la gestión y divulgación de proyectos.

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El templo de San Francisco y la Ruta del Barroco andino

Ubicada a mitad de camino entre las ciudades de Cusco y Puerto Maldonado, Marcapata es la puerta de entrada al “bosque de nubes” del flanco oriental de la cordillera de los Andes. Conocida también como la “capital de la niebla” el distrito fue parte de una milenaria ruta del oro y la coca que unía la Amazonía con la sierra sur del Perú.

En torno a ese trayecto se fueron levantado diferentes templos que conforman la denominada Ruta del Barroco Andino. Uno de ellos, el templo de San Francisco de Asís de Marcapata construido en barro, piedra y madera en el siglo XVIII. El techo de la monumental obra es de ichu y en su construcción solo se utilizó sogas. Las paredes de la iglesia conservan pinturas murales de gran belleza, sus umbrales son de sauco y el piso es de queuña roja y amarilla.

La importancia del templo, su ubicación estratégica y en particular, la peculiar ceremonia que se realiza cada cuatro años en torno a él, ha motivado que sea reconocido como Patrimonio Cultural de la Nación (2015) y que esté dentro de la lista elaborada por el World Monuments Fund de los sitios que requieren ayuda urgente para asegurar su conservación.

Wasichacuy y o Iglesiawasichay, así se dice en quechua, repaje en castellano, es la fiesta que convoca a las nueve comunidades del distrito de Marcapata -algunas ubicadas en la puna- para el trabajo comunitario y la renovación de los votos de reciprocidad comunes a los habitantes de los Andes. Marcapata forma parte de la recientemente lanzada Ruta Turística del Ausangate, la propuesta de desarrollo turístico que vienen implementando la Asociación Jesús Obrero – CCAIJO y los municipios de Ccatcca, Ocongate y Marcapata en los bordes del macizo Ausangate, el apu sagrado de los cusqueños.


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